Hoy se necesitan docentes con una profesionalidad pedagógica que se concrete en sus desempeños y modos de actuación y que despliegue las competencias siguientes:
– Fomentar el compromiso de sus deberes educativos como encargo social del contexto en que vive y en la que desempeña su labor como docente.
– Promover la preparación pedagógica idónea que le permita aplicar en su práctica educativa los métodos para la integración de los procesos de instrucción y educación, de enseñanza y aprendizaje, atendiendo a los componentes de la personalidad (cognitivo, afectivo – volitivo, ideológico y comportamental) en una formación integral.
– Aplicar la investigación educativa en sus diferentes áreas y en el proceso de formación una concepción interdisciplinaria con enfoque ético, axiológico y humanista de forma intencionada para dar respuesta científica a los problemas de la formación integral de la personalidad.
– Valorar el dominio de la Pedagogía como centro de Ciencias de la Educación, para el proceso de enseñanza – aprendizaje vinculado a la vida cotidiana y al desarrollo científico tecnológico contemporáneo.
– Promover el desarrollo de estrategias curriculares que vincule de la escuela con la familia y la comunidad para la educación integral.
– Analizar el empleo de las TIC como medios de enseñanza y de educación integral de profesionales y en la escuela dominicana.
– Desarrollar una ética profesional basada en el respeto a la dignidad humana, la solidaridad, la cooperación, la colaboración e intercambio profesional científico y académico, así como fomentar la ayuda mutua entre los colegas, con los estudiantes y los factores sociales con quienes interactúa.
Estas competencias de la profesionalidad de los docentes contribuyen a superar las barreras del positivismo y del pragmatismo que han permeado las prácticas educativas de los docentes hasta nuestros días. Dicha práctica educativa se ha caracterizado por la visión fragmentada de la Pedagogía como ciencia, viendo en el proceso educativo de forma separada la enseñanza – aprendizaje, así como los componentes de la personalidad y la dispersión de los currículos.
